Ingrid Beck y Mariana Carbajal llegan a Rosario con una obra que rompe con los estigmas de la menopausia
Las destacadas periodistas, referentes del feminismo en Argentina, presentarán en la Feria del Libro su “Antimanual para Encendidas. Una guía (in)útil para sobrevivir a la menopausia”. El encuentro tendrá lugar el sábado 18, a las 20, en el Auditorio del Cultural Fontanarrosa.
Con recorridos periodísticos destacados, referentes feministas y fundadoras del movimiento Ni una Menos, Ingrid Beck y Mariana Carbajal profundizaron sus coincidencias a partir de un hecho tan natural como estigmatizado: la menopausia. Tomando como puntapié el libro “Encendidas”, de Carbajal, en diciembre de 2024 lanzaron el podcast homónimo, cuya primera temporada se convirtió en un suceso y dio paso a un segundo ciclo (los veinte episodios están disponibles en Spotify y se complementan con las publicaciones que realizan en @encendidas.ok). Tomando como eje a diversas situaciones vinculadas con el climaterio y la menopausia, el podcast fue a su vez el impulsor de una serie de diálogos abiertos comandados por Beck y Carbajal, que con esa propuestas llegaron en julio a Santa Fe (en Ate Casa España) y en septiembre a La Usina Social de Rosario. Y será precisamente en esta última ciudad donde, como parte de la programación diagramada por el Ministerio de Cultura en la Feria Internacional del Libro, llevarán adelante la presentación de su «Antimanual para Encendidas. Una guía (in) útil para sobrevivir a la menopausia».
Acompañadas por la periodista rosarina Virginia Giacosa, Beck y Carbajal presentarán una obra con la que apuntan a cambiar la narrativa sobre la menopausia, apelando al humor como una herramienta clave para derribar mitos, sensibilizar y, también, poner en evidencia la falta de atención de la ciencia y la medicina en torno al tema. La presentación se desarrollará este sábado 18 de octubre, a las 20, en la Sala Auditorio del tercer piso del Cultural Fontanarrosa (San Martín 1080).
– El «Antimanual» tiene como antecedentes, primero, el libro “Encendidas” de Mariana y, posteriormente, la gran repercusión lograda con el podcast y sus veinte episodios (como así también los diálogos abiertos, que realizaron en julio en Santa Fe y en septiembre en Rosario). Con el respaldo que todo ese trabajo previo significa, ¿cómo empezaron a pensar en el Antimanual? ¿Desde un primer momento el humor aparecía como un posible hilo conductor?
– Mariana Carbajal: Nuestro libro también, además de todo ese recorrido que mencionás, tiene en su genealogía a las guías (inútiles) para madres primerizas que publicó Ingrid tiempo atrás. Hicimos ese cruce de nuestras trayectorias y siempre pusimos el humor en el centro. Porque creemos que el humor ayuda a hablar de temas que pueden ser difíciles, dolorosos. Nosotras nos reímos de nosotras. Y nuestra audiencia se ríe con nosotras. Y como uno de nuestros objetivos es sacar a la menopausia del silencio, quitarle el estigma que todavía tiene y abrir esta conversación sin vergüenza, estamos convencidas de que el humor es un gran aliado en ese desafío. Al llegar a la menopausia al principio la mayoría no sabe qué le está pasando, puede sentir enojo, tristeza, cambios de humor, tener olvidos, calores sofocantes, insomnio, caída de la libido, todo eso es un tsunami, un tsunami hormonal, y si no sabés que esa es la causa creés que te estás volviendo un poco loca. El humor ayuda también a naturalizar estas situaciones, a cambiarle la narrativa a esta etapa, del menopáusicas casi como insulto al de la menopausia como una transición hormonal.
– Ingrid Beck: El «Encendidas» de Mariana es muy iluminador y tanto a ella como a mí nos pareció que el diferencial tenía que ser la risa, ese intercambio divertido que se da entre nosotras. Somos dos menopáusicas muy distintas y eso nos permite sacar lo mejor (y lo peor) de cada una.
– Además de compartir experiencias, y de encontrar en ese humor una herramienta que colabora en la posibilidad de empatizar con los síntomas (¡numerosos!) propios de la menopausia, el libro también pone en evidencia la falta de acompañamiento de la ciencia, y la escasez de especialistas en menopausia. ¿Creen que el trabajo que vienen realizando podría impulsar un mayor grado de atención de parte de la medicina y la ciencia?
– I.B.: Es uno de los desafíos, llegar a la comunidad médica y científica con una demanda absolutamente lógica: que nos escuchen con empatía, que investiguen y que nos brinden soluciones a lo que nos pasa a las mujeres en el climaterio. No hay políticas públicas ni protocolos de atención para miles de personas climatéricas. ¡Es un tema de salud pública! Nos gusta pensar, además, que hablamos desde la perspectiva de las pacientes, y que comprendemos el contexto por el que hoy atraviesan los profesionales de la salud, así que también queremos abrir ese diálogo.
– M.C.: La menopausia no es una enfermedad, pero la llegada a la menopausia es una ventana de oportunidad para la prevención, por ejemplo, de la osteoporosis –causante a futuro de las típicas fracturas de cadera–, o de la enfermedad cardiovascular, principal causa de muerte en la población femenina, mucho más que el cáncer.
– Si bien podría pensarse que es un libro destinado a un público específico, lo cierto es que es un material que debería ser de lectura necesaria tanto para mujeres jóvenes como, también, para hombres. ¿Han tenido devoluciones de esos públicos «no específicos»?
– M.C.: Sí, justo esta semana el periodista Ernesto Tenemabaum comentó que escuchaba a su esposa, que lo estaba leyendo, reírse a carcajadas, y que finalmente ella le lee párrafos y se divierten juntos. Nos comentan ginecólogas que están llegando a su consultorio mujeres de alguna manera empujadas o aconsejadas por sus maridos que han escuchado nuestro podcast. Aunque nuestras oyentes son amplia mayoría mujeres, también tenemos un pequeño porcentaje, cada vez mayor, de varones interesados por saber qué le está pasando a sus parejas. Y está muy bueno que la conversación se amplíe en las familias, para que los hijos e hijas –quienes tienen– o la pareja –quienes tienen– sepan qué nos está pasando y no crean que estamos enloqueciendo, aunque un poquito sí (risas).
– I.B: También hay un público más joven, más acotado, sin dudas, que puede estar atravesando lo que se conoce como menopausia precoz –la insuficiencia ovárica prematura, que sí es una enfermedad–, que ha encontrado en nuestro podcast también un acompañamiento empático y mucha información, dado que no suelen encontrar con quién compartir sus vivencias entre amigas de la misma edad. A eso se suman todas las demás que en algún momento llegarán a esta etapa y a las que les recomendamos no llegar tan desinformadas como nosotras. A veces las sorpresas son muy buenas: en el caso de la huida de los estrógenos, mejor saber.