Murió un niño que había sido baleado en un tiroteo entre un policía y motochorros.
El trágico hecho se registró en la noche del miércoles en la localidad de Wilde, Buenos Aires-
Un niño de 10 años fue baleado en medio de un tiroteo entre un policía de civil y motochorros en la localidad de Wilde falleció luego de pelear varias horas por su vida. El menor, que estaba internado en el Hospital Finochietto en estado delicado, no logró sobrevivir a las heridas. La tragedia desató una serie de prtestas de los vecinos en el lugar, exigiendo mayor seguridad.
El incidente ocurrió en la noche del miércoles cuando el chico salía con su mamá de un club de barrio al cual había ido a entrenar. Mientras cruzaba la calle, se desencadenó un feroz tiroteo, y el niño recibió dos balazos en la espalda y el tórax.
Según el relato de un vecino que presenció toda la secuencia, el enfrentamiento se produjo entre un policía de civil y motochorros que intentaron robarle su moto. El agente dio la voz de alto y se defendió a tiros, desatando una escena de terror.
El niño fue trasladado de urgencia al Hospital Finochietto, donde permaneció internado en estado delicado: «Perdió cualquier cantidad de sangre», comentó un testigo.
La indignación de los vecinos no se hizo esperar. Protestaron por la falta de seguridad en el barrio y la ausencia de peritos que custodiaran el lugar donde el menor resultó gravemente herido. «Estamos esperando que vengan a peritar y nadie custodia esta escena. Estamos indignados por el accionar policial, no sé por qué motivo vinieron a llevarse la moto de los delincuentes», expresaron.
Otro vecino añadió: «Los chicos del club marcaron con tiza los disparos», en señal de protesta y desesperación por la falta de medidas de seguridad adecuadas en la zona.
