Una maestra denunció que balearon su casa por error y puso un cartel en la puerta para los tiradores
Voceros de la fiscalía rosarina confirmaron que a partir de los hechos, y por recomendación de la policía, la víctima decidió colocar el cartel en la puerta de su casa, con el objetivo de que no vuelvan a amedrentarla.
Una docente denunció que delincuentes balearon por error el frente de su casa de la zona sur de Rosario y dejaron mensajes para otra persona, por lo que, por consejo de los investigadores, colocó un cartel en la puerta del domicilio para explicares a los agresores que dispararon contra el domicilio equivocado, informaron fuentes judiciales.
«Yo no soy Arami. Se equivocaron! Mi nombre es Cecilia, soy maestra y alquilo hace un año y medio acá. Tengo dos bebés!», dice el cartel pegado en la puerta del domicilio ubicado en la calle Ayacucho, donde vive la mujer de 38 años con sus dos hijos de 1 y 3.
Voceros de la fiscalía rosarina confirmaron que a partir de los hechos, y por recomendación de la policía, la víctima decidió colocar el cartel en la puerta de su casa, con el objetivo de que no vuelvan a amedrentarla.
La dueña de casa es una docente que días atrás fue sorprendida por delincuentes que dispararon una decena de balas contra el frente del inmueble mientras ella se encontraba en el interior con sus dos pequeños hijos.
En esa aquella oportunidad, los tiradores escaparon y, cuando la mujer salió, encontró un cartel que decía textualmente: «Arami: traicionaste a la mafia, pagá las cagadas comunícate. La próxima vamos de tu mamá».
A raíz de ello, la docente colocó el mensaje dirigido a los tiradores y dejó de dormir en el domicilio que alquila, pese a que le queda más de un año de contrato.
Además, en dialogo con el canal Todo Noticias, la víctima dijo que le pedirá a la Justicia si puede ponerle una custodia o alguna medida de seguridad.
El caso es investigado por la fiscalía de Rosario, que solicitó la intervención de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), que participó en las pesquisas.
A su vez, se enviaron a peritar las vainas servidas y casquillos de bala hallados junto a la propiedad.