Comienza el juicio a una organización narco que operaba desde la cárcel de Piñero.
El debate, a cargo del Tribunal Oral Federal 3 de Rosario, tendrá inicio el próximo jueves. Se trata de doce personas acusadas de conformar una estructura criminal dedicada al transporte, distribución y comercialización de estupefacientes en distintos puntos de la ciudad.
El Tribunal Oral en lo Criminal Federal N°3 de Rosario dará inicio el próximo jueves al debate oral y público que juzgará la responsabilidad de doce personas acusadas de conformar una organización dedicada al transporte, tenencia y comercialización de estupefacientes, con la particularidad de que el presunto líder de la misma se encontraba detenido al momento de los hechos en la Unidad XI de Piñero, perteneciente al Servicio Penitenciario Provincial, desde donde impartía las directivas al resto de los imputados. Por parte del Ministerio Público Fiscal intervendrá el fiscal general Federico Reynares Solari.
Se trata de otro desprendimiento de causas que se fueron formando tras las intervenciones producidas originariamente en “Los Patrones” y luego en “Smolski”, que en diciembre pasado derivó en condenas para 17 personas.
Con la intervención a una persona de apellido Dávalos pudo establecerse la presencia de otra banda que se dedicaba al transporte, distribución y comercialización de estupefacientes en distintos puntos de la ciudad. Con el avance de la pesquisa se pudo llegar a quien sería líder, Leandro Vilches; según el MPF, digitaba cada uno de los movimientos de la organización desde su lugar de detención a través de su pareja Gisela Bocutti, sus hermana Gisela Vilches y el mencionado Dávalos, entre otros.
También se encuentran imputados José Fabián Ramí, Gustavo Rubén Farías, Jonatan Ezequiel Tosi, Daniel Alejandro Godoy, Mirta Adriana Díaz, Jonatan Emanuel Albanese, Leandro Ernesto Deb y Luz Belén Bibone por el delito previsto en el artículo 5, inciso c de la ley 23737 agravado por la intervención de tres o más personas.
Los hechos atribuidos a Vilches fueron encuadrados en la figura de organizador, por cuanto habría dirigido la organización dando directivas desde la Unidad XI de Piñero del Servicio Penitenciario Provincial a distintas personas con diferentes roles asignados en la organización.
La investigación culminó en abril de 2017 con el secuestro de 82 panes y medio de marihuana que arrojaron un peso de 50, 151 kilogramos -en un automóvil en el que se trasladaban Farías y Tosi- y otros 39 panes de marihuana por un total de 25,164 kilogramos -en un vehículo en el que iba Godoy. Luego se secuestró otra importante cantidad de estupefacientes en el domicilio donde habitaría un hombre de apellido González.
Desde el MPF informaron que ya se viene vislumbrando, en reiteradas causas, una lógica común que tiene que ver con personas alojadas en distintos centro de detención -principalmente del servicio penitenciario provincial-, desde donde, a través de la utilización de teléfonos celulares, se impartían órdenes y digitaba el comercio y la distribución en distintos puntos de venta de estupefacientes.