Más de 3.000 motociclistas murieron en accidentes de tránsito en 2018, según un estudio
La cifra representa el 42% del total de las víctimas en el tránsito, informó la Asociación Civil Luchemos por la Vida.
Más de 3.000 motociclistas murieron en Argentina durante 2018, cifra que representa el 42% del total de las víctimas en el tránsito, informó este jueves la Asociación Civil Luchemos por la Vida.
Según cifras de Luchemos por la vida durante 2018, más de 3.000 motociclistas murieron en Argentina, sumando el 42%, la mayoría de los muertos en el tránsito. Sin embargo, este porcentaje es mucho mayor en algunas localidades del país. En algunos casos supera el 80% de todas las víctimas en el tránsito.
La vulnerabilidad de los que circulan en moto, sin carrocería protectora, amerita medidas urgentes para protegerlos. Si bien las causas de los siniestros varían, en muchos casos el alcohol y el exceso de velocidad han sido los factores desencadenantes de las tragedias, pero en la mayoría de las víctimas fatales la falta de uso de casco ha sido determinante en su muerte.
La gravedad de estas cifras, que crece cada día, pone en evidencia la necesidad de incrementar los controles en general, de la conducción alcoholizada, de la velocidad y especialmente del uso de casco entre los motociclistas, además de brindarles educación vial.
«Los motociclistas que usan casco tienen un 73% menos de mortalidad y hasta un 85% menos de lesiones graves que los que no lo usan», señaló el estudio.
Cada vez más motociclistas sin casco mueren en el tránsito. Durante 2018 en Argentina murieron más de 3.000, la mayoría del total de víctimas fatales, el 42%. El casco es la principal protección para los que circulan en dos ruedas. https://t.co/oafbeJsvFZ#UsáCasco #CascoEnMoto pic.twitter.com/fGJE4lbUf0
— Luchemos por la Vida (@luchemosxvida) 31 de octubre de 2019
Para revertir estas tragedias, no bastan controles esporádicos y escasos, o algunos fines de semana en la esquina de un boliche. Las autoridades, responsables de la movilidad y el tránsito, deben comprender que sin controles efectivos ni sanciones eficaces y sin educación, no podremos avanzar significativamente en la seguridad vial, y salvar las más de 7.000 vidas que se pierden cada año en siniestros evitables.