España venció con claridad a Argentina 95-75 y es campeón
El seleccionado argentino de básquetbol cayó con amplitud frente a España en la final del Mundial China 2019, que se disputó en el Wukesong Sport Center de la capital Beijing.
El seleccionado argentino masculino de básquetbol perdió hoy ampliamente con España por 95-75 en el estadio Wukesong Sport Arena de Beijing y finalizó como subcampeón en el Mundial de China 2019.
El encuentro jugado en la capital del gigante asiático tuvo los siguientes parciales: Argentina 14-23, 17-20, 16-23 y 28-29.
Los goleadores argentinos fueron Gabriel Deck (24 puntos) y Nicolás Laprovíttola (17 tantos), mientras que España tuvo como principal figura al interno Marc Gasol (14 unidades, 7 rebotes y 7 asistencias), con una entrega defensiva destacable, y el escolta Ricky Rubio (20, 7 y 3).
Argentina comenzó el partido con nervios, malas decisiones en la conducción de Facundo Campazzo e ineficaz a la hora de atacar, ya que los perimetrales no consiguieron quebrar con comodidad la primera línea.
Del lado de enfrente, España fue todo lo contrario: fluidez ofensiva, movimiento de bola, profundidad con la altura de los internos (5 rebotes en ataque) y un goleo repartido para sacar una buena ventaja inicial (12-2) con 5m. por jugarse.
Y si bien Argentina ensayó una mejoría con un pasaje de 11-2 (13-14) cuando encontró su versión de correr en la transición de defensa a ataque y cambió su intensidad en el aro propio, las entradas de Pau Ribas (5 puntos) y Sergio Llull (2) reacomodaron el tablero español y cerraron al frente por 23-14.
En el inicio del segundo parcial, el conjunto nacional presentó las mismas fallas, a las que se le agregaron las pérdidas -9 en el primer tiempo- que produjeron el desbalance defensivo para que España ponga la máxima hasta ese momento de 31-14 tras un triple de Rudy Fernández a 7m. 44s.
Además, Campazzo fue absorbido por sus diferentes marcas y, más allá de la buena entrada de Nicolás Laprovíttola, Argentina padeció la poca participación de su principal figura, al igual que la floja actuación de Luis Scola (0/3 en tiros de campo en 16m.) frente la tarea impecable de Willy Hernangómez (6 puntos) y Marc Gasol (5) en la pintura.
La pelea en los tableros (España 26 a 15), la ausencia de la defensa que caracterizó al conjunto argentino en el campeonato y la efectividad del perímetro de los europeos justificaron la victoria parcial de 43 a 31.
España liquidó la historia en el tercer período, allí mató cualquier esperanza argentina de la mano de su interno Gasol, dominador en ambos costados, en la electricidad de sus bases y en el manejo cerebral de Rubio en cada circunstancia.
En contraste con lo mostrado a lo largo del torneo, Argentina se convirtió en un cúmulo de arrestos individuales y ahí se vio la diferencia de experiencia y de jerarquía de los planteles. Es por eso que el 66-47 al final de los 10 minutos estuvo justificado.
Los dirigidos por Sergio Hernández pelearon en el cuarto final, en el que Gabriel Deck se destacó con su entrega y aporte en ataque, pero España mostró sus credenciales y aseguró sin sufrir su segundo título del mundo al que llegó luego del 95-75.
Argentina sumó su segundo subcampeonato mundial (Indianápolis 2002) y se quedó sólo con el primer lugar de Buenos Aires 1950. España repitió el título que obtuvo por primera vez en la edición Japón 2006.
-Síntesis –
Argentina (75): Facundo Campazzo 11, Nicolás Brussino 8, Patricio Garino 0, Luis Scola 8 y Marcos Delía 2 (FI). Nicolás Laprovíttola 17, Tayavek Gallizzi 0, Lucio Redivo 0, Máximo Fjellerup 0, Luca Vildoza 2, Agustín Cáffaro 0 y Gabriel Deck 24. DT: Sergio Hernández.
España (95): Rudy Fernández 11, Ricky Rubio 20, Juancho Hernangómez 11, Pierre Oriola 6 y Marc Gasol 14 (FI). Willy Hernangómez 11, Víctor Claver 2, Sergio Llull 15, Pierre Oriola 6, Quino Colom 0, Xavier Rabaseda 0, Javier Beiran 0 y Pau Ribas 5. DT: Sergio Scariolo.
Parciales: Argentina 14-23, 17-20, 16-23 y 28-29.
Árbitros: Cristiano Maranho (Brasil), Yohan Rosso (Francia) y Steven Anderson (Estados Unidos).
Estadio: Wukesong Sport Arena, de Beijing.
Fuente: Telam