Imputan a 7 personas por robo sistemático de medicamentos e insumos en el Hospital Clemente Álvarez
Empleados del hospital fueron acusados de sustraer y comercializar medicamentos de alto valor. Todos quedaron en prisión preventiva hasta el 11 de agosto.
La Justicia imputó a siete empleados del Hospital Clemente Álvarez por un sistema organizado de hurto y comercialización ilegal de medicamentos e insumos médicos.
Una investigación judicial sin precedentes dejó al descubierto una red de hurtos sistemáticos dentro del Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (H.E.C.A.) de Rosario. La causa involucra a más de siete empleados municipales, varios de ellos con cargos jerárquicos, quienes fueron imputados por robar insumos y medicamentos hospitalarios para luego comercializarlos ilegalmente.Durante allanamientos realizados el 4 de julio, se incautaron miles de dosis de fármacos, material descartable y equipamiento hospitalario valuado en millones de pesos.
En la audiencia imputativa realizada el 10 de julio de 2025, el fiscal José Luis Caterina detalló los delitos cometidos por cada uno de los implicados, entre los que se encuentran hurto, incumplimiento de deberes de custodia, encubrimiento agravado y venta de medicamentos sin autorización.
La jueza Dra. Chiabrera dictó prisión preventiva hasta el 11 de agosto para todos los acusados.
Robos sistemáticos y encubrimiento
Entre los imputados se encuentra Eduardo T., empleado del área de Control Interno, quien habría sustraído insumos en agosto de 2024, cargándolos en vehículos de una cochería con acceso autorizado a la morgue. La complicidad de Antonio A., coordinador del área, habría sido clave: no solo no denunció los hechos, sino que en su domicilio se hallaron packs de medicamentos de muestra médica sin justificación legal.
Otros empleados del hospital, como Darío F., Oscar L., Fernando L., Roberto R., Nelson S. y Javier D., también fueron implicados en maniobras similares. Durante allanamientos realizados el 4 de julio, se secuestraron cientos de cajas de medicamentos, jeringas, agujas, bisturíes, guantes, vendas y otros insumos hospitalarios.
En algunos casos, los elementos fueron hallados dentro del hospital, en áreas como la ropería, y en otros, en domicilios particulares y lockers personales.
La venta ilegal de medicamentos
Además del hurto, a varios de los implicados se les imputa la venta clandestina de medicamentos, muchos de ellos con la leyenda “muestra médica” o “prohibida su venta”, lo que agrava su situación judicial.
El caso pone en evidencia fallas graves en los controles internos del hospital y genera una profunda preocupación sobre la seguridad del patrimonio público y el acceso a la salud.
Los imputados y sus roles:
Eduardo T. (Control Interno): Acusado de robar insumos mediante vehículos de una cochería municipal.
Antonio A. (ex-Coordinador de Control): Encubrió los hurtos y almacenó medicamentos sin autorización.
Darío F. (Economato): Hallaron en su casa 139 cajas de Valsalep D y otros fármacos bajo receta.
Oscar L. y Fernando L. (Operarios): Sustrajeron barbijos, jeringas y medicamentos guardados en lockers.
Roberto R., Nelson S. y Javier D. (Ropería): Vendían insumos como penicilina, omeprazol y dexametasona.
Lo incautado en los allanamientos: 1,500 cajas de medicamentos (desde antihipertensivos hasta antibióticos). Agujas, jeringas, gasas y equipos de bioseguridad. Muestras médicas etiquetadas como «no negociables».
La jueza Chiabrera dictó prisión preventiva hasta el 11 de agosto para todos los acusados. Las penas podrían extenderse por encubrimiento agravado (funcionarios públicos) y venta ilegal de medicamentos.