Habían alquilado la casa de su padre que había fallecido.
El hombre fue a la casa de su padre y se encontró con un desconocido que la había alquilado.
En la madrugada del viernes, personal policial se trasladó a un domicilio ubicado en las inmediaciones de las calles Polonia al 200 en Pueblo Nuevo tras una denuncia por averiguación de paradero de un hombre de 81 años y la presencia de un fuerte olor a descomposición en el lugar donde vivía.
Según indicaron las fuentes, el hijo del desaparecido indicó que su padre estaba bajo el cuidado de una prima de la víctima. Al llegar al domicilio, los efectivos se encontraron con un hombre de 37 años quien declaró vivir allí desde hacía cinco días, alegando que había alquilado la vivienda a un «amigo» identificado como hijo de la cuidadora. El hombre negó conocer el paradero de hombre de 81 años Ruben Ociel y atribuyó el olor a «comida en mal estado», permitiendo el ingreso de la policía para corroborar su versión.
Tras varios intentos, el hombre que había alquilado la vivienda logró contactar al supuesto arrendatario, quien reveló que Rubén Ociel había fallecido el 27 de enero en el Sanatorio Plaza. Posteriormente, su nieta se comunicó con el centro médico, confirmando el deceso, aunque sin detalles sobre la causa. El sanatorio solicitó que la familia se contactara en la mañana para más información.
Ante la falta de claridad sobre las circunstancias del fallecimiento y la posible negligencia en el cuidado del adulto mayor, el caso fue derivado a la Seccional 25ª por cuestiones de jurisdicción. La Fiscalía de Flagrancia en Turno supervisa la investigación, que busca determinar responsabilidades, especialmente en torno al abandono del domicilio por parte de la cuidadora y la legalidad del alquiler.
La investigación continúa abierta bajo la órbita de la Fiscalía. Se esperan novedades tras el análisis forense y las declaraciones pendientes de los involucrados.
