La Justicia ratifica que el fiscal Alberto Nisman fue asesinado en conexión con la causa AMIA
La fiscalía que investiga la muerte del funcionario judicial ratificó que se trató de un homicidio vinculado a la investigación del atentado a la AMIA y la denuncia por el Memorándum con Irán.
A ocho días del décimo aniversario de su muerte, la fiscalía que investiga el fallecimiento del fiscal Alberto Nisman ratificó categóricamente que se trató de un homicidio. La investigación vincula directamente este crimen con el trabajo de Nisman en la causa del atentado a la AMIA y su denuncia por la firma del Memorándum de Entendimiento con Irán.
Un informe de 56 páginas elaborado por el fiscal federal Eduardo Taiano, a cargo de la investigación, concluye que «el fiscal federal Natalio Alberto Nisman fue víctima de un homicidio y que su muerte estuvo motivada en su labor en la UFI-AMIA y, concretamente, con su accionar vinculado al Memorándum de Entendimiento con la República de Irán».
El documento subraya que continúan las investigaciones para identificar a los autores materiales e intelectuales del hecho, siguiendo la hipótesis de la fiscalía. El juez del caso, Julián Ercolini, delegó la investigación en la fiscalía de Taiano, que centra su atención en el rol de los servicios de inteligencia durante el gobierno de Cristina Kirchner, además de profundizar las medidas de prueba para dar con los responsables del crimen.
El rol de los servicios de inteligencia y el Memorándum con Irán
El informe destaca la histórica vinculación de los servicios de inteligencia con la investigación del atentado a la AMIA, intensificada tras la creación de la UFI-AMIA por orden del entonces presidente Néstor Kirchner y el mandato de colaboración a la SIDE con el fiscal Nisman.
Sin embargo, la fiscalía advierte un cambio tras el fallecimiento de Kirchner: «Aproximadamente para finales del año 2010 y principios de 2011, el Poder Ejecutivo Nacional, en cabeza de Cristina Fernández de Kirchner, decidió un viraje en su política exterior respecto de la República Islámica de Irán, que se tradujo en una orden a la Secretaría de Inteligencia para que cese en la investigación del atentado a la sede de la AMIA y su colaboración con el fiscal que llevaba adelante la causa».
Esta orden generó una «fractura» en la SIDE entre quienes se negaron a cumplirla y las autoridades nacionales. En este contexto, se sitúa la firma del Memorándum de Entendimiento con Irán y la posterior denuncia de Nisman sobre su inconstitucionalidad.
La fiscalía también investiga medidas del Poder Ejecutivo para «favorecer y fomentar» la labor de inteligencia del Ejército Argentino en ese período.
Avances en la investigación y nuevas medidas
La investigación incluye nuevas medidas de prueba, como órdenes de presentación a empresas telefónicas para obtener registros de llamadas de cerca de 100 nuevas líneas telefónicas.
Además, se imputó a Luis Alberto Heiler (prefecto general de la Prefectura Nacional Argentina), Román Di Santo (jefe de la Policía Federal Argentina), Sergio Berni (secretario de Seguridad del Ministerio de Seguridad de la Nación) y Darío Ruiz (secretario de Cooperación con los Poderes Judiciales, Ministerios Públicos y Legislaturas del Ministerio de Seguridad de la Nación) por irregularidades en el procedimiento realizado en el complejo Le Parc tras la muerte de Nisman.
Continúan las declaraciones de agentes de inteligencia que mantuvieron «comunicaciones relevantes» el fin de semana del fallecimiento de Nisman, así como el entrecruzamiento de información. La fiscalía reafirma su compromiso con el esclarecimiento del caso y la identificación de todos los responsables.
