Provincia convierte en centro de atención de consumos problemáticos lo que fue un kiosco narco
El Gobierno provincial entregó un inmueble incautado a la agrupación Madres Territoriales. También financió las refacciones, los muebles y el equipamiento del lugar. Allí vivió una familia de narcos. El inmueble que fue decomisado ahora tiene por fin recuperar personas con adicciones, en trabajo conjunto con una ONG.
El Ministerio de Gobierno e Innovación Pública, a través de la Agencia Provincial de Registro, Administración y Destino de Bienes y Derechos Patrimoniales (Aprad), entregó un inmueble decomisado en una causa de narcotráfico a la asociación civil Madres Territoriales de la ciudad de Rosario.
La iniciativa se enmarca en las políticas que la Provincia lleva adelante para debilitar las organizaciones criminales atacando su economía, por lo cual se decomisan los bienes vinculados a actividades ilícitas y luego se devuelven a la sociedad.
La actividad fue encabezada por la ministra de Igualdad de Desarrollo Humano, Victoria Tejeda y el secretario de Gestión de Registros Provinciales, del Ministerio de Gobierno, Matías Figueroa Escauriza. También estuvo presente la ministra de Salud, Silvia Ciancio.
El sitio, ubicado en la zona de Nicaragua y Pitágoras, en el sector conocido como Villa Fanta (al oeste de Rosario, cerca de Circunvalación), funcionó como un lugar de venta de estupefacientes, y ahora pasa a manos de la asociación civil Madres Territoriales, que se dedica a la rehabilitación de personas con consumos problemáticos.
Antes de su cesión, Provincia refaccionó el espacio y suministró el equipamiento, con fondos provenientes de las subastas de bienes decomisados al delito. La casa cuenta con 15 plazas de alojamiento y espacios para talleres.
Una política de Estado
“Cuando asumimos el Gobierno nos encontramos con que había muchas propiedades de las bandas narco criminales más importantes de la ciudad de Rosario, y el Estado no había avanzado en la toma de posesión. Con una fuerte definición política del gobernador Maximiliano Pullaro, avanzamos en esta toma de posesión de la casa, desalojamos y además tomamos posesión de otras 15 propiedades de las bandas narco criminales más grandes del Rosario”, relató Escauriza. “Todos estos bienes que fuimos recuperando para debilitar a las organizaciones criminales los fuimos dando para diferentes fines: algunas de estas propiedades las vamos a subastar, otras tendrán otros usos, y a esta casa la quisimos trabajar en conjunto con la Asociación Civil Madre Territoriales, que trabaja con los jóvenes que tienen dificultades por el consumo de drogas, las principales víctimas de los narcos. Es la primera vez que pasa en la Argentina que a una casa que se compró con la plata del narcotráfico, el Estado se la saca y se la da a una institución que va a trabajar con las personas que tienen problemas de adicción para su recuperación”.
Quien también dio detalles de la acción fue Luciano Sciarra, secretario de la Agencia de Prevención del Consumo de Drogas y Tratamiento Integral de las Adicciones (Aprecod). “Donde antes funcionaba el narcotráfico, vivía una familia de narcotraficantes, hoy se transforma en un lugar para la recuperación de adicciones, para el acompañamiento de personas que tienen problemas. Va a estar a cargo de la Asociación Civil Madres Territoriales, con el apoyo de la Aprecod”, subrayó el funcionario.
Trabajo en equipo para transformar
En tanto, Betina Zubeldía, titular de la Asociación civil Madres Territoriales Nacionales contra las Adicciones, explicó que será “una casa de medio camino”, es decir “un espacio donde las personas transitan hasta que puedan conseguir un lugar más cerrado que los pueda contener”.
Respecto a cómo estaba la casa cuando empezaron a trabajar en ella, señaló: “Cuando empezamos a habitar la casa, estaba toda amurada, o sea que estaban todas las ventanas con ladrillos, totalmente aislada”. Con los cambios en marcha, “este lugar será de encuentro, donde el adicto empiece a descubrir que no es lo que dicen que es, sino que empieza a descubrir quién es en realidad y eso lleva un gran trabajo”.
Entidades
Madres Territoriales se fundó en 2012 en Rosario. Realiza un trabajo integral con asistentes sociales, psicólogos y médicos. Además de brindar tratamiento a personas con adicciones, brindan alojamiento a quienes están en el programa y no tienen un lugar donde vivir.
Madres Territoriales articula acciones con la Agencia de Prevención de Consumo de Drogas y Tratamiento Integral de las Adicciones (Aprecod), dependiente del Ministerio de Igualdad y Desarrollo Humano, a través de la firma de un convenio de colaboración.
Por su parte, la Aprad es la entidad del Gobierno que administra los bienes y efectos que son objeto de secuestro u otras medidas dispuestas en causas judiciales como consecuencia de delitos o contravenciones.