Los radicales presentaron su nuevo bloque en Diputados: “Democracia para siempre”
El bonaerense Pablo Juliano presidirá la bancada de los 12 diputados radicales referenciados en Facundo Manes y Martín Lousteau que ayer pegaron el portazo al bloque de la UCR.
Este martes se presentó oficialmente el nuevo bloque radical «Democracia para Siempre», que integra a 12 diputados tras su separación de la bancada de la Unión Cívica Radical (UCR) liderada por Rodrigo De Loredo. El anuncio formal se hizo a través de una carta dirigida al presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, en la que se detalla la creación de esta nueva agrupación, presidida por Pablo Juliano.
Entre los integrantes del bloque figuran figuras destacadas como el líder político de Juliano, Facundo Manes, y otros miembros relevantes como Marcela Antola, Fernando Carbajal, Carla Carrizo, Mariela Coletta, Marcela Coli, Melina Giorgi, Juan Carlos Polini, Jorge Rizzotti y Danya Tavela. Esta escisión responde a diversas tensiones internas que, según se explicó, se intensificaron con el tiempo, principalmente por diferencias en la conducción y decisiones estratégicas del espacio radical.
La formación del bloque “Democracia para Siempre” representa la convergencia de dos vertientes radicales: el sector liderado por Manes y la corriente Evolución, encabezada por el senador Martín Lousteau y Emiliano Yacobitti. Este último grupo proponía que Carla Carrizo asumiera la presidencia del nuevo bloque; sin embargo, prevaleció la decisión de la mayoría, dada la influencia de Manes sobre la mayoría de los integrantes.
En el esquema de la nueva conducción, Carrizo fue designada como secretaria parlamentaria, un rol clave para la coordinación con otras fuerzas, mientras que la vicepresidencia quedó en manos de la pampeana Marcela Coli, también alineada con Manes. Por su parte, el correntino Manuel Aguirre ocupará la Secretaría General.
La escisión ha debilitado notablemente al bloque de la UCR bajo el mando de De Loredo, que pasó de contar con 33 diputados a solo 21. Las tensiones entre los sectores de Manes y Lousteau con la conducción de De Loredo habían comenzado al inicio de la gestión de Javier Milei, intensificándose luego de que cinco «radicales peluca» apoyaran al Gobierno en la votación sobre la movilidad jubilatoria y financiamiento universitario, lo que generó malestar entre los disidentes.
Aunque se discutió la posibilidad de postergar la ruptura, la negativa del oficialismo radical a replantear la estructura de conducción del bloque precipitó la división. La imagen de De Loredo y otros radicales en Casa Rosada fue el detonante final para que los disidentes optaran por formalizar su alejamiento.
El bloque de 12 diputados ya ha comenzado a explorar diálogos, inicialmente informales, con otros espacios de la oposición como Encuentro Federal y la Coalición Cívica, con vistas a una posible alianza parlamentaria que amplíe sus posibilidades de incidencia en el Congreso.