Axel Kicillof encabezó acto del Día de la Lealtad con fuerte respaldo de la CGT y críticas a Milei

El gobernador estuvo acompañado por una decena de intendentes, gremialistas y funcionarios de su gestión.

El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, lideró hoy el acto central por el Día de la Lealtad en la localidad de Berisso, acompañado por sindicalistas de la Confederación General del Trabajo (CGT) e intendentes del PJ, pero sin la presencia de representantes de La Cámpora. En un contexto de tensiones internas en el peronismo y a poco de cerrarse el plazo para la presentación de candidaturas a la presidencia del Partido Justicialista (PJ), Kicillof fue el único orador del evento, reafirmando su apoyo a la ex presidenta Cristina Kirchner y lanzando duras críticas al gobierno de Javier Milei.

En su discurso, Kicillof exigió «basta de persecución y proscripciones» en referencia a la situación judicial de Kirchner, a pocos días de conocerse un fallo clave de la Cámara de Casación en la causa Vialidad. «Un tribunal de la vergüenza va a querer hacer creer que Cristina es culpable», advirtió el mandatario provincial, dejando clara su postura de defensa hacia la ex mandataria.

Durante el acto, que tuvo lugar en Berisso, considerada el «kilómetro cero» del peronismo, Kicillof también arremetió contra el gobierno de Milei, acusándolo de implementar un modelo «piramidal» que perjudica a la población. El gobernador aseguró que «el pueblo es el que el año que viene le va a poner un freno a Milei en las urnas» y llamó a construir una «alternativa superadora». Además, criticó duramente los recortes en áreas clave como transporte, educación y seguridad, y advirtió sobre los peligros de las políticas económicas del actual presidente.

Kicillof instó a la unidad del peronismo y pidió «no dramatizar» las diferencias internas, citando a Cristina Kirchner en su llamado a que «en la discusión somos todos iguales». Además, resaltó la necesidad de «escuchar y ser modestos», para no caer en las divisiones que, según él, busca la derecha.

Acompañado por figuras como Héctor Daer y Pablo Moyano, referentes sindicales de la CGT, y varios intendentes del conurbano, Kicillof cerró su discurso con un mensaje de esperanza, invitando a «construir una nueva esperanza colectiva» y desafiando las políticas de Milei, a quien acusó de «privar de posibilidades a millones de argentinos».

Entre los asistentes al acto destacaron el intendente local Fabián Cagliardi, su vicegobernadora Verónica Magario, y los ministros provinciales Carlos Bianco y Andrés Larroque, entre otros. Sin embargo, la ausencia de representantes de La Cámpora fue notoria en medio de las tensiones internas en el PJ, donde Kicillof no ha expresado un respaldo explícito a la candidatura de Cristina Kirchner para presidir el partido.

El acto, cargado de referencias a la historia del peronismo y al legado de Néstor y Cristina Kirchner, finalizó con cánticos de la militancia que proclamaban a Kicillof como «presidente», a lo que el gobernador respondió llamando a enfocar la lucha en el bienestar del pueblo argentino.


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