El Gobierno se mantiene neutral en la interna del PRO y clarifica su relación con Macri.
A pesar de los reclamos y con idea de consolidar un interbloque entre las fuerzas, la administración libertaria anticipa que no pagará la deuda por la coparticipación a la Ciudad de Buenos Aires.
En medio de la tensión interna en el PRO, el Gobierno nacional se distancia y presenta una nueva propuesta: consolidar un interbloque legislativo. Esta medida, aclaran, «no es una necesidad, es un deseo», buscando unificar fuerzas en el ámbito legislativo.
Desde la Casa Rosada, se minimizan los movimientos recientes del expresidente Mauricio Macri, considerando que su conflicto con la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, favorece a La Libertad Avanza (LLA), que continúa fortaleciendo su estructura y consolidando su estatus legal.
Los libertarios, llenos de optimismo, afirman que no necesitan aliados, evitando responder a las críticas de algunos sectores del PRO. «El PRO no le marca agenda a nadie», opinan algunos, advirtiendo que esta actitud podría llevar al partido a su desaparición. La invitación a unirse a las filas libertarias está abierta para todos aquellos «del centro a la derecha» que deseen sumarse.
Desde el círculo cercano de Javier Milei, se prevé que la relación con el PRO seguirá profundizándose, a pesar de los desacuerdos de Macri, quien se ha opuesto a una fusión entre el PRO y LLA. Se especula que el descontento de Macri se debe a que sus aspiraciones no coinciden con las ideas de Milei para el espacio aliado.
Macri ha mostrado interés en ocupar posiciones estratégicas como la AFIP, ADUANA, ANSES, la Inspección General de Justicia (IGJ), y AYSA, lo que ha generado tensiones dentro del PRO.
La Disputa por la Coparticipación
A pesar de las quejas de la Ciudad de Buenos Aires, el ministro de Economía, Luis Caputo, informó personalmente al jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, que la Nación no saldará la deuda por coparticipación, a pesar de un fallo judicial. Se sugiere que Jorge Macri y Caputo habían llegado a un acuerdo meses atrás, del cual Mauricio Macri podría no estar al tanto.
La presión desde las arcas porteñas, atribuida a Mauricio Macri, es vista como una estrategia de división. «Estará rompiendo el acuerdo. Divide y reinarás», comentaron fuentes cercanas.
Hacia la Consolidación de un Interbloque Legislativo
A pesar de las diferencias, el Presidente ha hablado de una fusión entre ambos partidos, proponiendo consolidar un interbloque legislativo que ya funciona de facto, con el objetivo de institucionalizarlo. «No es una necesidad, es un deseo. Creemos que estamos listos para avanzar en este sentido», afirman desde las filas libertarias.
Las reuniones para concretar esta consolidación se han llevado a cabo durante semanas, con la promesa de que, aunque no hay fecha definida, el acuerdo se formalizará «más temprano que tarde». Desde el PRO, sin embargo, revelan que aún queda mucho por discutir antes de alcanzar un acuerdo definitivo.
