El consumo sigue en caída libre: recreación bajó 43% y calzado e indumentaria 27%
Son datos de la Cámara de Comercio de mayo último. La recesión y la pérdida de poder adquisitivo impacta con fuerza.
El consumo continúa su tendencia a la baja debido a la recesión y la pérdida de poder adquisitivo, con una caída del 7,7% en mayo, según datos de la Cámara de Comercio y Servicios (CAC). Los rubros más afectados fueron Recreación y cultura, con una disminución del 42,6%, e Indumentaria y calzado, con una caída del 27%.
El Indicador de Consumo (IC) de la CAC también mostró una disminución del 2,2% respecto a abril. Este indicador, que refleja la evolución del consumo de los hogares en bienes y servicios finales de forma mensual, ha acumulado una disminución interanual del 4,3% en los primeros cinco meses del año, marcando un «profundo deterioro en el consumo» hacia mediados de 2024.
La CAC destacó que «continúa la tendencia bajista en las tasas de crecimiento interanual exhibidas por el IC desde enero», registrando en mayo el mayor valor negativo desde febrero de 2021. Este contexto económico se da en un escenario donde la inflación, aunque en desaceleración, sigue impactando negativamente en el poder de compra de las familias. En mayo, la inflación mensual fue del 4,2%, con una interanual del 276,4% y una acumulada anual del 71,9%.
A pesar de la desaceleración de la inflación, se espera que los aumentos tarifarios de gas y electricidad, postergados de mayo a junio, puedan acelerar nuevamente la inflación y afectar el poder adquisitivo de las familias. La CAC advierte que estos incrementos tarifarios podrían aumentar el gasto en vivienda y reducir el poder de compra en otros rubros.
El informe también señala que el contexto recesivo limita las posibilidades de aumentos salariales nominales que permitan una recuperación de la demanda. Además, los incrementos en la Asignación Universal por Hijo (AUH) y la tarjeta alimentaria, así como los bonos a jubilados, parecen insuficientes para recomponer el poder de compra de los sectores más vulnerables.
El desempeño de la economía argentina y el consumo han presentado un comportamiento similar, con tasas de variación interanual que suelen moverse en la misma dirección. En 2024, la actividad económica ha mostrado un comportamiento negativo que persiste en los últimos datos disponibles.
Al analizar el desempeño de algunos rubros específicos, se observa una dinámica generalizada de decrecimiento interanual respecto a mayo de 2023, con la excepción del transporte. Indumentaria y calzado mostró una disminución del 27% en mayo, explicada por una caída en el ingreso real de los hogares y un aumento en la deuda en tarjetas de crédito, lo que ha llevado a la postergación de consumos no esenciales.
Por otro lado, el rubro de transporte y vehículos registró una disminución del 11,3% en mayo, debido a una caída del 8% en los patentamientos de automóviles, un encarecimiento del precio de la nafta y una disminución en las ventas de combustible. Recreación y cultura sufrió un derrumbe del 42,6%, también explicado por la caída en el ingreso real que redujo el poder de compra para bienes y servicios relacionados con el ocio.
El apartado de vivienda, alquileres y servicios públicos mostró un incremento del 6,3% en mayo, impulsado por una mayor demanda de electricidad debido a temperaturas más bajas de lo habitual para esta época del año. El resto de los rubros experimentaron una contracción del 3,7% en mayo, posicionándose un 1,8% por debajo de los niveles pre-pandemia.
