Abren la importación de repelentes ante el aumento de casos de dengue.
Además queda suspendida por 30 días la intervención de la ANMAT.
El Gobierno decidió este jueves suspender durante 30 días la intervención la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) en la importación de repelentes para mosquitos. La medida regirá para aerosol, crema, spray y gel en medio de la inédita epidemia de dengue.
En respuesta a la creciente epidemia de dengue en Argentina, el gobierno ha tomado una medida significativa para facilitar el acceso a los repelentes de mosquitos. La suspensión de la intervención de la ANMAT en la importación de estos productos es una decisión temporal que busca agilizar el proceso y asegurar que los repelentes estén disponibles para quienes los necesiten con urgencia.
Esta medida refleja la gravedad de la situación actual, con más de 180,000 casos confirmados de dengue y aproximadamente 130 muertes. La facilidad de importación sin trámites adicionales es un paso adelante en la lucha contra esta enfermedad transmitida por mosquitos, que ha alcanzado niveles históricos en el país.
El Ministro de Salud, Mario Russo, ha expresado su compromiso de resolver la escasez de repelentes en las próximas dos semanas. Los fabricantes de repelentes han ajustado su logística para maximizar la producción, lo que es un indicativo de la seriedad con la que se está tomando esta crisis de salud pública.
La simplificación de la importación de repelentes y sus insumos desde el inicio de la gestión actual, incluyendo la eliminación de ciertas regulaciones y la reducción de los plazos de pago, son medidas que apoyan la rápida distribución de estos productos esenciales. Además, la suspensión del cobro de IVA adicional y de la retención del impuesto a las ganancias para los repelentes terminados alivia la carga financiera sobre los importadores y consumidores.
Estas acciones del gobierno argentino muestran una respuesta proactiva y enfocada a una crisis de salud que afecta a miles de personas. La disponibilidad de repelentes es crucial para prevenir la propagación del dengue y proteger la salud pública. Con la colaboración de los productores y el apoyo gubernamental, se espera que la situación mejore en las próximas semanas.
