Familiares de Melani Juárez apuntan a un inquilino de la pensión que “la acosaba”
«El chico dio de baja todas sus redes y dio de baja el celular», dijo hoy Agustín, uno de los hermanos de Melani, la bailarina encontrada muerta ayer.
Familiares de Melani Juárez, la joven de 21 años asesinada a puñaladas en una pensión de la ciudad de Rosario, insistieron en que se investigue la pista de un inquilino que, según ellos, «acosaba» a la víctima y que dejó el hospedaje el último domingo, a pesar de haber pagado el mes completo.
«El chico dio de baja todas sus redes y dio de baja el celular», dijo hoy Agustín, uno de los hermanos de Melani, la bailarina encontrada muerta ayer.
Mientras tanto, el fiscal del caso, Ademar Bianchini, tomó declaración esta mañana a la dueña de la pensión y a personas alojadas en el lugar en busca de evidencias para la causa.
Según indicaron fuentes del caso, la propietaria del inmueble sólo tenía el nombre de pila del joven sospechoso y su número de teléfono celular, que ya habría dado de baja.
Se trata de una persona que el domingo pasado dejó la pensión tras llamar a un flete para llevar sus cosas, a pesar de haber pagado el mes completo de alojamiento, indicaron los familiares.
«De la nada el pibe se va, borra sus redes, si no tuviera nada que ver, ¿por qué haría todo eso?», se preguntó Agustín, quien esta mañana estuvo presente en el Centro de Justicia Penal de Rosario, sede de la Fiscalía de Homicidios.
Daniel, otro de los hermanos, dijo en declaraciones a Canal 3 de Rosario que Melani le había contado a otra hermana «que el chico este la acosaba» y que «a ella no le gustaba, le parecía medio loco».
El cuerpo de la joven apareció con entre 12 y 14 puñaladas ayer a la mañana en el cuarto de la pensión que alquilaba, ubicada en 9 de Julio al 500, en el centro de Rosario.
El informe médico de la Policía señaló que podría llevar 36 horas muertas cuando fue encontrado, luego de que la familia perdiera contacto con ella y que la chica abandonara en las últimas 48 horas la actividad en las redes sociales, en las que participaba con frecuencia, lo que llamó la atención de los parientes.
Por su parte, Magalí, hermana de la víctima, contó que la puerta de acceso al cuarto estaba cerrada con llave por dentro y las ventanas se encontraban abiertas y sin trabas.
«El televisor estaba encendido a todo volumen y el cuerpo de Melani se encontraba desnudo, todo ensangrentado, en el piso, con la cabeza apoyada sobre la cama», relató la chica.
La víctima había trabajado en una empresa de telefonía, de la que había sido despedida, y sus familiares dijeron que se desempeñaba en una empresa de cadetería.
Según la investigación, el joven que dejó la pensión el último domingo también trabajaba para una aplicación de cadetería, a la que la Justicia le requirió datos vía oficio.
Si bien los familiares de Melani apuntan a esa pista, la Fiscalía no brindó datos hoy sobre los avances de la investigación y voceros judiciales sostuvieron que por ahora «no se descarta ninguna hipótesis» sobre el móvil del crimen y el o los autores.