Imputaron a tres masculinos como partícipes del crimen de Eduardo Trasante.
Un piloto comercial de nacionalidad peruana procesado por traficar 15 kilos de cocaína y dos jóvenes que habrían seguido sus indicaciones a cambio de una paga fueron imputados anoche como partícipes necesarios del crimen del Pastor y exconcejal de esta ciudad Eduardo Trasante.
Los fiscales Gastón Ávila y Matías Edery acusaron a Julio Rodríguez Granthon (27), alias “Perú” o “Peruano”, quien está preso en la cárcel santafesina de Piñero, de ser quien desde el pabellón 9 realizó las gestiones para conseguir el vehículo utilizado el 14 de julio en el crimen de Trasante.
Mientras que endilgaron a Alejo Leiva (21) y a Facundo Sebastián López (22) haber recibido directivas o pedidos de Rodríguez Granthon y de otro preso en el mismo pabellón, un hombre ligado a la banda de “Los Monos” llamado Elías Zenón, para adquirir el Peugeot 308 blanco empleado en el crimen.
De ese modo, según la acusación, ambos habrían participado de la logística necesaria para cometer el asesinato, cuyos autores materiales aún no están identificados en la investigación.
Con evidencia basada en mensajes de Whatsapp y llamadas telefónicas entre los implicados, además de declaraciones testimoniales, los fiscales entendieron que los tres debían ser imputados como partícipes necesarios de homicidio doblemente calificado por promesa remuneratoria y por el concurso premeditado de dos o más personas, agravado por el uso de arma de fuego y el concurso de dos o más personas.
A la vez, acusaron por encubrimiento del crimen a Leiva y López, vinculados a la compra y posterior “descarte” del vehículo.
El juez penal Hernán Postma aceptó la imputación y dictó prisión preventiva por el plazo de ley –hasta la realización del juicio- para los tres acusados.
“Luce probable que tanto López, Leiva como Rodríguez Granthon realizaron con grado de probabilidad un aporte fundamental al plan criminal”, dijo el juez al cerrar la audiencia esta noche.
Agregó que “no hay evidencia desincriminante ni hechos nuevos” que logren modificar la presentación de la Fiscalía, y calificó al crimen de Trasante como “un hecho gravísimo”.
De acuerdo a la acusación, “Rodríguez Granthon realizó las gestiones para conseguir el vehículo Peugeot utilizado para cometer el homicidio” y para ello “se comunicó con mensaje de voz con Brian Nahuel ‘Buba” Álvarez para solicitarle el vehículo”.
Álvarez ya fue imputado en el caso como partícipe por ser quien compró el Peugeot por 20 mil pesos a un joven que lo había robado un día antes.
En el mismo audio, Rodríguez Granthon “le manifestó que se lo entregue a una persona de su confianza que se iba a comunicar con él y que después le iba a pagar”.
Según los fiscales “Facundo López, siguiendo las indicaciones de Rodríguez Granthon y en base a la información que le proporcionó a este último Isaías Zenón, se comunicó en nombre de Rodríguez el 11 de julio con Brian Álvarez, con el objetivo de que este le entregara el Peugeot”.
Eduardo Trasante fue asesinado el 14 de julio pasado delante de su familia, en la vivienda que compartía con su pareja, Carolina Leone, en San Nicolás al 3600 de esta ciudad.
De acuerdo a la investigación, dos hombres golpearon la puerta y preguntaron por el pastor evangelista, para luego ingresar por la fuerza y dispararle en la cabeza sin que mediaran palabras o discusión.
A través del registro de llamadas y de mensajes de los celulares de Leiva y López, los fiscales determinaron que el mismo día del crimen el segundo se comunicó con el primero para buscar en su domicilio las llaves del Peugeot.
López fue acompañado por dos vecinos, a los que les habría pagado 500 pesos, a retirar la llave en el domicilio de Leiva y de ahí fueron a buscar el vehículo y lo dejaron abandonado, según declaró uno de los vecinos implicados en el hecho.
Si bien aún no existe un móvil conocido del asesinato del exconcejal rosarino, padre de una de las víctimas del triple crimen de Villa Moreno ocurrido en Año Nuevo de 2012, para los investigadores Rodríguez Granthon podría ser el ideólogo del hecho.
El “Peruano”, como lo conocen, está detenido desde el año pasado en una causa por drogas, acusado de ser el líder de una banda a la que le secuestraron 15 kilos de cocaína, 5 millones de pesos y más de 100 mil dólares. Telam