Engañan por teléfono a un anciano y le roban 50.000 dólares y joyas.
El hecho ocurrió en la puerta de un edificio ubicado en Dorrego y Mendoza, en el centro de Rosario.
Un hombre de 83 años fue víctima de un engaño telefónico y les entregó 50.000 dólares y joyas a delincuentes, en la ciudad de Rosario, donde ya se registraron numerosas estafas bajo esa modalidad, informaron hoy fuentes judiciales.
El último caso ocurrió ayer alrededor de las 19 en la puerta de un edificio ubicado en Dorrego y Mendoza, en el centro de Rosario.
Según la denuncia de familiares de la víctima, el anciano recibió una llamada a su teléfono fijo realizada por una mujer que dijo ser su hija y le indicó que le entregara el dinero que tenía guardado y las joyas a un amigo que iba a pasar a buscarlos porque tenía que hacer una operación financiera.
Así, el hombre entregó 50.000 dólares y joyas al supuesto amigo de su hija, que actuó con al menos un cómplice que lo esperaba a bordo de una camioneta.
La maniobra fue advertida un rato más tarde por el yerno de la víctima, quien pasó a buscarlo para llevarlo al cumpleaños de su hija y al escuchar el relato de su suegro supo de inmediato que había sido estafado.
«Él estaba convencido de que era yo. Sabían mi nombre y el de mi marido», relató Sandra, la hija del engañado, al hacer público el caso luego de radicar la denuncia ante la Fiscalía y la policía de Rosario.
La mujer dijo que el delincuente llegó hasta el edificio donde vive su padre a bordo de una Pick Up que quedó estacionada a metros del lugar donde se realizó la entrega del dinero y que fue filmado por una cámara de seguridad, mientras que el cómplice que estaba en el rodado nunca se bajó.
En los últimos meses se registraron en Rosario varios hechos criminales cometidos bajo similar modalidad.
Uno de ellos ocurrió el lunes 1° de junio a las 14.30 en Pasaje Álvarez al 1500, en el microcentro de Rosario, cuando una mujer denunció que su padre de 93 años que vive solo había sido estafado por delincuentes a los que les entregó 100 mil dólares y 100 mil pesos para «un cambio de billetes».
El anciano les contó a los policías que había entregado el dinero a un hombre en la esquina de la plaza Pringles, ubicada frente a la Bolsa de Comercio, luego de que lo llamara alguien que dijo ser conocido de un familiar suyo.
Según un informe elaborado y divulgado en la primera semana de junio por el Ministerio Público de la Acusación (MPA) de Rosario, en mayo se radicaron 16 denuncias: 14 por hechos conocidos como «cuento del tío» y dos bajo la modalidad de secuestro virtual.
Diez de esos hechos llegaron a consumarse, ya que las víctimas entregaron dinero, mientras que los otros seis quedaron en «grado de tentativa», consigna el informe.
Basados en las declaraciones de las víctimas, los investigadores establecieron que en los diez hechos consumados, los estafadores se alzaron con un total de 923.000 pesos, 280.000 dólares y aproximadamente 3.000 euros, más una gran cantidad de joyas.
Se trata de un botín de más de 25 millones de pesos a la cotización actual de las divisas extranjeras, señalaron las fuentes consultadas por Télam.
Asimismo, los pesquisas lograron establecer un perfil de las víctimas y determinaron que en todos los casos fueron adultos mayores que, en su mayoría, viven solos o con sus parejas y son contactados por vía telefónica bajo distintos engaños.
El MPA, indicó que los hechos registrados en mayo y los que se denunciaron en lo que va del mes de junio son investigados en conjunto por la similitud en su mecánica por el fiscal Mariano Ríos, de la Unidad de Investigación y Juicio.
Para los investigadores se trata de una misma banda la que roba bajo esa modalidad en distintos puntos de Rosario, el Gran Rosario y la región sur provincial.
A raíz de la sucesión de casos, las autoridades judiciales divulgaron una serie de recomendaciones para evitar estafas telefónicas, entre ellas que las personas que reciban esta clase de llamadas a un teléfono fijo inmediatamente corten la comunicación y llamen al 911 y que no entreguen dinero a desconocidos bajo ninguna circunstancia. Telam