Detienen a integrante de la “mafia china” que ordenaba balear a comerciantes si no pagaban u$s50 mil

El procedimiento lo realizó personal de la Policía Federal Argentina y se lo llamó «Operación pescado explosivo»

Un hombre de nacionalidad china fue detenido por personal de la Policía Federal Argentina en el barrio porteño de Balvanera, acusado de liderar una organización mafiosa que extorsionaba a comerciantes connacionales, a quienes les exigía un pago de 50 mil dólares a cambio de supuesta «seguridad» para poder trabajar, para lo cual contrataba a otras personas que actuaban con mano de obra local y que les ordenaba balear en las piernas a los cajeros de los comercios o incendiarles las persianas para amedrentar a sus víctimas.

Fuentes policiales y judiciales aseguraron que la clave para detener al sospechoso fueron los audios de WhatsApp que hallaron los investigadores en uno de los teléfonos que habían sido secuestrados en el marco de la causa, donde un hombre le decía a otro: «Tenemos que hacer eso que te dije antes: o pegar tiros o quemarle la persiana al chino».

La detención del sospechoso, identificado como Zheng Jianwei, el ciudadano chino que se hacía llamar «Adrián», fue concretada ayer por efectivos de la División Antifraude de Policía Federal Argentina (PFA), en forma conjunta con detectives de la Superintendencia de Investigación Federales, tras seis allanamientos realizados en la Capital Federal por orden del Juzgado Criminal y Correccional 33, a cargo de Darío Bonanno.

La sospecha del juez Bonanno es que «Adrián» lideraba una facción de la denominada «mafia china» conocida como «A/C (Argentina China)» que extorsionaba a supermercadistas connacionales, a quienes les exigía 50 mil dólares para brindarle una especie de seguridad para dejarlos trabajar.

Pero la investigación comenzó cerca de las 3 de la madrugada del 13 de diciembre del 2019, cuando un policía que se hallaba de consigna en proximidades de supermercado chino llamado «Fu Shun», ubicado en la calle La Rioja 2137, detuvo a dos hombres que llegaron a bordo de un Volskwagen Gol Trend y que dejaron una nota extorsiva por debajo de la puerta.

Fuentes de la investigación aseguraron a Télam que, si bien la nota estaba escrita en chino mandarín, el dueño del comercio la tradujo y le contó a la Justicia que decía: «Tenes que pagar 50 mil dólares en dos días, sino te matamos» y un número telefónico.

Dentro del Voslkwagen Gol, los policías hallaron otras seis notas similares y en todas ellas amenazaban a sus destinatarios con mensajes donde les exigían 50 mil dólares.

«Patrón, prepárate 50 mil dólares dentro 2 días, si no solucionar espera cambiar balas»; «Patrón, te doy ultima oportunidad para pensar, dentro de 2 días compañía va a mandar una persona, va a venir a solucionar. Yo te aseguro que este negocio va a estar en las noticias en Argentina. Si no me crees, podría traer una persona y probar»; «Patrón, te doy ultima oportunidad, dentro de 2 días recibido y manda alguien a solucionar. Te aseguro que tu negocio va a eliminar uno a uno y va a estar en las noticias», son algunas de las notas escritas en chino mandarín que fueron traducidas por un perito y que constan en el expediente judicial.

Pero la clave para los investigadores fue el secuestro de los dos teléfonos celulares que les secuestraron a los dos hombres detenidos en 2019, quienes fueron procesados y permanecen con prisión preventiva: el peruano Jhon Darwin Chanco Torres y el venezolano Edgar Ramón Díaz Suárez.

Allí, tras un análisis tecnológico de los peritos policiales, se logró extraer una serie de mensajes y audios de WhatsApp en los que Chanco Torres y Díaz Suárez revelaban la actividad que les ordenaba «Adrián».

Allí, uno de los detenidos le explicaba a otro sobre el trabajo que tenia que realizar: «Tenemos que hacer eso que te pase en los videos, o pegar tiros o quemarle la persiana al chino», dice uno de los audios, mientras que otro señala que tiene «la bomba de humo, la granada de fuego para tirar cuando esté cerrando el supermercado».

Además, aclara que «es todo de la mafia china, lo que pasa es que ellos no se quieren ensuciar las manos y me pidieron el trabajito».

Tras obtener una serie de elementos de importancia para la causa, el juez Bonanno ordenó seis allanamientos con el fin de lograr la detención del sospechoso apodado «Adrián», a quien finalmente se lo encontró en una vivienda ubicada en la avenida Rivadavia al 2300, en el barrio de Balvanera.

Las fuentes precisaron que durante el procedimiento los efectivos secuestraron una importante cantidad de teléfonos celulares, entre los cuales se presume que estarían aquellos utilizados para las maniobras extorsivas.

A su vez, los policías secuestraron elementos electrónicos de interés para la causa, entre ellos un disco externo, una tablet, una notebook, tres handies de comunicación, ocho tarjetas de chips prepagos, un pendrive, un disco que contenía las cámaras de seguridad, una caja de seguridad y más de medio millón de pesos.

El ciudadano chino detenido hoy fue trasladado a una alcaidía policial y mañana será llevado a los tribunales para ser indagado por el juez Bonanno.


Share

También te podría gustar...

error: Protegido por COPYRIGHT