El testimonio de un niño respalda la versión de un acusado de matar a Débora Mansilla

El hermanito de Débora Mansilla, de seis años, contó en una Cámara Gesell que la joven «se prendió fuego» y que el acusado intentó sofocar las llamas

Débora Mansilla, la chica de nuestra ciudad que salió a la calle envuelta en llamas a pedir la ayuda de sus vecinos la tarde de Navidad, criaba a un hermano de 6 años que estaba en la casa cuando se desató la tragedia. Por la muerte de la joven está preso su concubino de 21 años, acusado de un homicidio en un contexto de violencia de género, quien asegura que su pareja se roció alcohol en medio de una discusión y, al amenazar con prenderse fuego con un encendedor, la situación se le fue de las manos y terminó quemándose. El testimonio del nene se consideraba clave y por eso ayer al mediodía brindó su relato en una Cámara Gesell.

El niño dijo que estaba en la vereda en el momento en que su hermana se quemó y que, desde allí, vio cuando su compañero intentaba apagar las llamas arrojándole agua de un dispenser en el que quedaba poco contenido. El relato del nene coincide con lo que había declarado en una audiencia imputativa del jueves pasado Brian O., la pareja de la víctima.

Cuando la chica sufrió las quemaduras letales el 25 de diciembre pasado, el joven fue acusado de lesiones graves y quedó en libertad. Tras una agonía de diez días inconsciente, la chica falleció el jueves pasado en el hospital Provincial. Al saber que lo buscaban para agravar su acusación, O. se presentó en la fiscalía. A las dos horas fue sometido al trámite en el cual la jueza Hebe Marcogliese le dictó la prisión preventiva sin plazo. Eso fue apelado por el defensor Daniel Kantor, quien ante el resultado de la Cámara Gesell podría pedir en estos días una revisión de la situación de Brian.

Clave y urgente

La entrevista al nene había sido solicitada por urgencia tanto por el fiscal de Homicidios Florentino Malaponte como por el defensor público. Es que el relato del nene, único testigo, se consideraba clave. La medida se realizó ayer a las 11 en una sala especial donde el chico fue interrogado por una psicóloga, mientras una psicóloga de la defensa y un asesor de menores presenciaban el relato desde atrás de un vidrio. En otra sala equipada con una pantalla, presenciaban la entrevista el imputado, las partes y la jueza Marcogliese.

«La Cámara Gesell fue sumamente esclarecedora. A través de la versión de un niño se ratificó en un todo la declaración que dio mi defendido desde un primer momento. Algo respaldado además por varios testimonios que muestran que no hubo ninguna participación suya. Al contrario, se ve claramente que él quiso salvar la vida a su pareja y está angustiado por esta situación», dijo el defensor Kantor.

En llamas

Débora tenía 20 años y era mamá de una nena de un año y medio. La tarde del 25 de diciembre resultó quemada en el 50 por ciento de su cuerpo mientras estaba con Brian y la hijita de ambos en la casa que compartían en el barrio Coronel Aguirre de Villa Gobernador Gálvez. Con ellos estaba además el hermano de ella, un nene de 6 al que criaban juntos desde hacía cuatro años.

Los vecinos contaron a este diario —también en la investigación fiscal— que la chica salió envuelta en llamas y, para auxiliarla, la arrojaron a una zanja. Luego la trasladaron al hospital. «Fue desesperante. La terminamos de apagar con una manguera. Ella hablaba, no perdió el conocimiento. Todo el tiempo le pedía perdón a su hija y decía que no le hiciéramos nada a él (por Brian O.) porque ella se había hecho eso (quemarse)», dijo una de las vecinas que la ayudó.

Al ser acusado de un crimen agravado por la violencia de género, que se pena con prisión perpetua, Brian contó en la audiencia que esa tarde alrededor de las 17 volvieron de visitar a los abuelos de ambos y él se acostó a dormir la siesta con su hija.

Pero Débora, según relató, quería abrir la pequeña granja que atendían en esa casa de San Lorenzo al 2000. Ella insistió con levantar la persiana, algo que él no quería hacer porque habían trabajado hasta las 5 de la madrugada. Comenzaron a discutir y la chica le pidió a su hermanito que se retirara un momento.

El muchacho dijo que Débora tenía tendencias suicidas. Que primero amenazó con cortarse con una cuchilla, pero él la disuadió. Y que luego tomó un envase de alcohol, se roció y mientras amenazaba con acercarse al cuerpo un encendedor la situación se descontroló. Todo ocurrió, según dijo, mientras él tenía a la beba en brazos.

Con la joven en llamas, él intentó llenar un calefón eléctrico pero no lo logró por la escasa presión de agua que había, algo habitual en esa zona especialmente en verano. Entonces tomó un dispenser de agua que estaba casi vacío, con lo cual tampoco pudo sofocar las llamas. Y finalmente la chica salió a la calle.

Similar

Según fuentes del caso consultadas por este diario, el hermanito de la víctima brindó ayer la misma versión que Brian. Dijo que esa tarde volvieron en remís de la casa de los abuelos y que enseguida su hermana lo mandó a la calle a jugar. Por ese motivo no estaba dentro de la casa en el momento en que Débora sufrió las quemaduras.

Cuando le preguntaron al nene qué había pasado, varias veces contestó que «Débora se prendió fuego». Lo que sí alcanzó a ver desde la vereda fue que Brian intentaba sofocar las llamas con el agua escasa de un dispenser. Y relató que finalmente alguien la pateó hacia el interior de una zanja y ella le gritó a su pareja «ayudame».

El nene no dijo haber escuchado gritos ni presenciado golpes esa tarde. Tampoco refirió incidentes previos de maltrato o violencia en la relación. Para la defensa, el relato del nene fue «el esperado» y por eso es probable que Kantor reclame en las próximas horas la libertad de Brian O., quien sostiene «desde el primer momento» que todo se trató de «un triste accidente».

Fuente: La Capital


Share

También te podría gustar...

error: Protegido por COPYRIGHT